En uno de los edificios bancarios de la céntrica avenida de Huelva, alguien ha escrito un grafitti en su fachada, la que hace esquina con la calle La Bomba. Y pregona:
LibertadFirmado por el sello anarquista de la A, inscrita en una circunferencia. No sabemos lo que ha hecho el tal Amadeu para que sus correligionarios pidan su libertad. Si está allí será por algo, no me creo que sea una hermanita de la Caridad. Ahora que, ya puestos y revisado su expediente, tal y tal, si en justicia lo merece, que lo pongan de patitas en la calle. Pero condicionalmente. Sí, a condición de que, una vez en libertad vigilada, que se pase por la fachada del banco pacense, que hace esquina con la calle La Bomba, y borre el adefesio de grafitti que han puesto sus colegas, dejando la pared como los chorros del oro. Y, si no, pues ajo y agua, a la sombra, que no se está nada mal, con la caló que hace por estos pagos.
Amadeu Casellas
Lamentamos tener que hacernos eco de este tipo de comentarios que sólo buscan la deslegitimación gratuita y la manipulación barata de los valores del contrario, pero salimos al paso en esta ocasión para no tener que volver a hacerlo más.Amadeu Casellas lleva más de 25 años en la cárcel por atracos a bancos, con los que financiaba luchas obreras durante la mal llamada Transición, en la cual, como todos sabemos, los agentes "del orden" del Estado Español y sus leyes eran (como ahora) "hermanitas de la caridad". Muchos grandes criminales en los más altos escalones del poder han sido absueltos legalmente, pero aún está por ver si serán también absueltos por la Historia.
Amadeu ha realizado varias huelgas de hambre. En la penúltima, estuvo más de 70 días sin comer y las muestras de apoyo y solidaridad se extendieron por todo el mundo, también por Badajoz, donde se repartió información y se colgaron pancartas. Consiguió al fin un compromiso por parte de los Serveils Penitenciaris de Catalunya de que le sería otorgado el tercer grado y la puesta en libertad. No se cumplieron dichos acuerdos, y volvió a iniciar otra huelga de hambre, la cual ha dado por finalizada viéndose aún entre rejas.
En este contexto, alguna persona solidaria ha querido dejar su grito clamando por la injusticia en una pared. Sus "correligionarios", dices, como si los amantes de la libertad se inscribiesen en sectas, tuviesen doctrinas y obedeciesen a líderes, y todos llevasen cuernos y rabo rojos. Resulta que en los medios de comunicación que seguro que usted considera como libres, nada, ni una palabra se ha dicho de la situación de Amadeu. Él es sólo un número, un dato, como mucho, un pequeño fallo de un sistema perfecto. Sin embargo, entérese: es una persona. Merece justicia no sobre el papel y los discursos, si no ahora en el mundo real. Él es sólo una punta del inmenso iceberg. Y los papeles, las cadenas de TV, las emisoras de radio... todas callan, o lo comentan en letra chica en alguna edición perdida. Y mientras, Amadeu sigue en la cárcel.
Parece que te duele mucho una pared sucia y no te revuelve el estómago una injusticia cometida contra un ser humano. Y no contento con eso, haces una broma que se te viene grande: "que se pase por la fachada del banco pacense, que hace esquina con la calle La Bomba, y borre el adefesio de grafitti que han puesto sus colegas". No sólo te importa poco que sea inocente, si no que además lo responsabilizas de una pintada que es físicamente imposible que haya realizado. Es un gran ejemplo de razonamiento simplificador al más puro estilo totalitario. Y si no, a la sombra que no se está tan mal, ¿no? Esperamos que no se vuelva contra ti esta ironía macabra.
Nuestro más sincero respeto por la persona que haya hecho ese "adefesio", porque seguramente no pudo publicar su mensaje en ningún periódico de prestigio. Sigue lamentándote por una pared. Nosotrxs nos lamentamos por un ser humano que está a la sombra y que, sí, con la caló que hace por estos pagos, desearíamos ver libre.
¡Ánimo Amadeu! Salud y anarquía
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